En varias ocasiones y visitando inmuebles con agentes inmobiliarios, he visto este tipo de puertas en algunos rellanos.
Son puertas antiokupas, se instalan delante de las puertas originales de entrada a una vivienda, y su misión es dificultar el asalto a la fuerza al su interior.
No son aptas para que el propietario resida en la vivienda porque no tienen mirilla, ni pomo y se abren hacia fuera. Se pueden comprar o alquilar por días.
La semana pasada y por encargo de un inversor, estuve visitando pisos de banco para reformar, con el objetivo de redactar un informe de rentabilidad y presupuesto de cada una de mis visitas, a fin de tomar decisiones sobre las mejores oportunidades.
Mi curiosidad sobre el otro lado de la puerta antiokupa ha quedado cubierta.
Así he vivido estas visitas:
Acompañada por un agente que no lleva llaves, se acciona la apertura de la puerta mediante una app en el teléfono móvil.
Primera advertencia y primera impresión: no hay luz, uff!
Mientras enciendo la linterna del móvil, el comercial desconecta la alarma.
Una vez en la vivienda la incomodidad es la única sensación. Difícilmente se venderá esta vivienda; se respira negatividad, mal rollo, problemas vividos, mala vibra.
Colores estridentes recubren las paredes.
Elementos eléctricos arrancados de cuajo.
Muebles de cocina que van directamente al container. . .
Y ya siento que me pica todo, cuando mi creatividad empieza a mostrarme como quedaría la vivienda después de una intervención de Home Staging exhaustiva, y un buen trabajo de relooking.
Devolver la alegría a la vivienda, despersonalizar paredes y convertir el patio en un oasis donde disfrutar de las noches de verano.
En la redacción del informe de rentabilidad logro transmitir mi entusiasmo al inversor, y allá vamos, a recuperar hogares que se perdieron durante la crisis y la pandemia.
Mirando hacia adelante, aportando serenidad y frescura, pintando paredes en blanco, iluminando rincones opacos con luces, flores, y plantas.
Y así de esta manera, renacerá un nuevo hogar al otro lado de la puerta.
¡Mejor con Home Staging!
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